Ayer, 5 de diciembre de 2011, falleció a los 85 años Monseñor Jorge Hourton, obispo auxiliar de Temuco (Chile). A la izquierda -donde le gustaba estar a él- se le puede ver en una fotografía, en la cual no estaba disfrazado -solía "vestirse" así, ignoro si por alergia a la tela del traje talar obligatorio que debería haber vestido-.
¿Por qué recojo la noticia de su fallecimiento? Para encomendar su alma a Dios y para desearle a él que encuentre tanta paz, como descanso nos deja.
Para quien nunca hubiera oído hablar de él, le pondré en antecedentes con algunos ejemplos. Serán sus propias palabras las que le definan.
Hace un par de años, Vivian Lavín entrevistó a Monseñor Jorge Hourton para la Radio Universidad de Chile, y entre otras "perlas" dijo lo siguiente (me abstengo de comentarios):
¿Por qué recojo la noticia de su fallecimiento? Para encomendar su alma a Dios y para desearle a él que encuentre tanta paz, como descanso nos deja.
Para quien nunca hubiera oído hablar de él, le pondré en antecedentes con algunos ejemplos. Serán sus propias palabras las que le definan.
Hace un par de años, Vivian Lavín entrevistó a Monseñor Jorge Hourton para la Radio Universidad de Chile, y entre otras "perlas" dijo lo siguiente (me abstengo de comentarios):
¿Cómo surgió el conflicto con el ex Cardenal Ratzinger, actual Papa Benedicto XVI?
Cuando yo opiné y defendí el derecho que tenían los parlamentarios católicos de votar por una ley de divorcio que fuera justa y sobretodo que acabara con este sistema que había de la nulidad. Yo apoyé eso y otros obispos decían ‘los parlamentarios deben votar según la doctrina de la Iglesia’, yo decía ‘deben votar en conciencia’, y si en conciencia creen que una ley de divorcio es necesaria para resolver tantos casos de separaciones, de fracasos matrimoniales, porque se producen fracasos no porque sean malos los contrayentes, sino que por que llegó una situación en que ya no se entienden, no hay amor, es un fracaso de una institución que quiere mantener y vivir el amor. Yo opinaba que ellos podían votar la ley de divorcio y saqué algunas doctrinas que en la ley natural la indisolubilidad no era de ley natural, sino una consecuencia pero no la misma ley natural, entonces parece que esa explicación no fue tolerada, porque es muy discutible. La iglesia tiene una interpretación, se vale, invoca la ley natural, pero es dueña de la ley natural, si hay una ley natural está antes que la ley eclesiástica.
En cuanto al motu proprio Summorum Pontificum, el Papa y la misma Iglesia Católica, esto era lo que hace algo más de cuatro años dijo este obispo "católico", en la Revista Reflexión y Liberación:
UNIDAD ENTRE CATÓLICOS Y ENTRE CRISTIANOS. Monseñor Jorge Hourton
Dos recientes documentos de la Santa Sede están cayendo más bien mal no sólo en el mundo católico sino también en la ecumene cristiana: el motu propio que restablece la misa tridentina y la declaración de la Congregación para la Doctrina de la Fe que reafirma que la Católica es la única verdadera Iglesia de Cristo.
Se dio como razón de la primera la conveniencia de recuperar a los católicos tradicionalistas, lefevbrianos y otros. Razón que también puede valer para la segunda. El Obispo cismático lefevbrista en Paris, Mons. Fellay, señaló la relación que él auspiciaba entre ambas:”se cumple la tradicional norma teo-Lógica”, dijo a sus feligreses: “Lex orandi, lex credendi”. “Roma está volviendo a la verdadera manera de orar, después volverá a la verdadera manera de creer” ( O sea: nos encontrarán razón y tirarán su Concilio)
Los integristas lefevbrianos, en realidad tienen otra doctrina que la del Concilio Vaticano II, al que consideran herético. Aborrecen la doctrina de la Iglesia como “Pueblo de Dios” y la noción de Eucaristía como cena de comunidad en lugar de sacrificio incruento de la Cruz.
[NOTA: este obispo "católico" ha muerto negando que la Santa Misa es el Sacrificio incruento de la Cruz, que es Dogma de Fe, no una opinión de los "integristas lefevbrianos"]
En el catolicismo francés, en el cual surgió el cisma lefevbriano, hay una seria inquietud y molestia, que los obispos tratan de calmar. La gran mayoría se inquieta por una norma que favorece al cisma y pareciera querer detener el desarrollo que han tenido las expresiones litúrgicas después del Concilio. Piensan que el esfuerzo hecho tras tantos años de renovación litúrgica, bíblica y pastoral, queden frustrados por una especie de liturgia a la carta según los gustos de los consumidores. Y que al interior de la Iglesia esta liberalización sirva para el surgimiento de nuevos movimientos conservadores, retrógrados y nostálgicos de los tiempos anteriores al Concilio. ¿No está ya sucediendo?
[NOTA: Para el recién fallecido obispo "católico", es la liturgia tradicional la que es "a la carta"... Si no fuera tan grave y triste, esta afirmación sería para morirse de risa]
La opinión pública católica tenderá a ver estas novedades sobre todo como ofensivas al prestigio de Vaticano II. Quienes recuerdan el soplo renovador que se sintió en los años 1962-5 con el Concilio, no pueden comprender que alguna gente en la Iglesia tenga nostalgia del tiempo, usos y costumbres, estilos y autoridades, anteriores al Concilio. Más todavía si creen ver que esa nostalgia ronda por la plaza de San Pedro. No pueden comprender que los tradicionalistas prefieran la misa en latín, idioma que no entienden. Se preguntan si es precisamente porque no lo entienden que les gusta.
La razón dada para estos nuevos pasos ha sido la de estrechar filas con los tradicionalistas. ¿No se advierte que al mismo tiempo se producen otros disidentes que se alejan porque no se reconocen en actitudes tan conservadoras ?
[NOTA: Sí, si se advierte. Es que ya no interesa -ni debiera haberlo hecho nunca- evitar que se alejen esos "otros" disidentes. Cuanto más lejos, mejor. La Iglesia Católica no necesita personas no católicas en su interior, minándola desde dentro. Y su obligación, ya no sólo como obispo, sino como simple sacerdote, debería haber sido conservar, y no intentar destruir, la Iglesia Católica, fundada por Jesucristo, que es la única verdadera]
Queda muy dañado también el ecumenismo. Todo el acercamiento que se estaba logrando con una teología sobre la libertad religiosa, la doctrina de la justificación con los luteranos, los vínculos de mayor respeto mutuo con los ortodoxos por el reconocimiento de la alta espiritualidad de su teología patrística, el acercamiento con los anglicanos y la conversión de sus pastores, etc., todo eso sufrirá un serio retardo si el Vaticano no da mejores señales de interesarse por el ecumenismo. Y que no lo mueva la teoría de que la unidad de los cristianos solo consiste en que todos los disidentes vuelvan a la obediencia del Papa. Al menos eso es lo que parece entenderse con la Domine Jesu y su reciente reiteración.
[NOTA: Este obispo "católico" creía que el "ecumenismo" consistía en que la Iglesia Católica dejara de serlo, para integrarse en no se sabe qué nueva religión. ¡Y hasta se escandalizaba de que el Papa -como cualquier católico de bien- pretenda que herejes y cismáticos vuelvan a Roma, a la Iglesia Católica!]
La Iglesia Católica por cierto tiene el derecho y el deber de decir cual es su propia comprensión de la Iglesia de Cristo. Se comprende también que las otras confesiones cristianas no tengan la misma comprensión. Para la Católica, reposa sobre un trípode: sacramentos, sucesión apostólica y ministerio de Pedro; le garantizan la posesión de la verdad revelada y de los medios de salvación. Las otras Iglesias tienen otros criterios. ¿Son ellos menos católicos?
[NOTA: ¡Pues claro! No es que sean menos católicos: es que no lo son en absoluto, ni jamás lo han sido]
En el sentido confesional del término, ciertamente. ¿Son menos cristianos? Habría que dialogar más para cerciorarse bien. Se requeriría sobre todo que el conjunto de los cristianos, sin sus etiquetas, puedan un día reconocer que la Iglesia de Cristo es un misterio que sobrepasa a cada una de sus familias particulares y que las llama a todas a no ser más que una.
En fin, son sus propias palabras las que dejan bien claro que de "católico" tenía más bien poco este "obispo rojo" chileno. Por cierto, las notas escritas en rojo son mías.
Que el Altísimo reciba su alma, y le perdone sus pecados y el escándalo que produjo entre los fieles católicos con sus enormes y graves errores.
Que el Altísimo reciba su alma, y le perdone sus pecados y el escándalo que produjo entre los fieles católicos con sus enormes y graves errores.
Sin palabras...
ResponderEliminarMe veo obligado a no defender, sino dar una opinión diferente a la que, de forma violenta y carente de contexto, das en tu artículo.
ResponderEliminarEn Chile durante la dictadura militar Mons. Hourton defendió a los perseguidos y fue un valiente defensor de los DDHH. Si ves las noticias en Chile, hay un inmenso pesar entre los que lo conocieron, porque vieron en él alguien que SI representaba lo que la iglesia debiera representar, y hace tiempo no lo hace.
Defendió a gente que por pensar diferente era perseguida, torturada y exiliada, acaso ¿no fué ese el mensaje de Jesús?.
Mucha de esa gente que el defendió no era católica, y he ahí su mayor mérito, cuál es el merito de defender a los propios solamente? (Mt 5:43-48)
Hablas de su apoyo al divorcio como si fuese algo puramente malo, pero el catesismo católico lo acepta en casos en que sea "la única manera posible de asegurar ciertos derechos legítimos, el cuidado de los hijos o la defensa del patrimonio" (can. 1151-1155). Y aunque no fuese así, qué derecho tenemos los católicos de imponer nuestras creencias sobre los no-católicos, que representan mayoría tanto en Chile como en españa.
Te ves cegado por tu fanatísmo que potencia tu intolerancia, es por gente como tú que cada vez hay menos católicos, cómo incentivar a los no católicos a seguir el catolicismo, si lo único que ven son personas fanáticas e intrascendentes como tú.
Y por último, si vamos a hablar de quién va en contra de lo que dice el vaticano, me parece que tu tampoco has tomado en cuenta las reformas impuestas por el concilio vaticano II.
En mí opinión la supesta "piedad que muestras", al ofrecer rezar por su alma, sin ni siquiera haber averiguado más de lo que dice en esta entrevista! contrasta con el tono burlesco y irónico de lo que escribes.
Para mí, no eres más que un fariseo que predica y no práctica.
Ojála que algún día abras los ojos y no veas a los que piensan diferente como una amenaza, puede que ellos sepan algo que ni tú, ni el papa Benedicto sepan.
Hola Alain Hourton:
ResponderEliminarEn primer lugar, gracias por escribir tu comentario.
En segundo lugar, me gustaría matizar que en esta entrada de mi blog no veo la violencia por ninguna parte. Me he limitado a poner íntegras las palabras de mons. Jorge Hourton.
En el caso del divorcio, he escrito que no iba a comentar nada, porque sus propias palabras lo dicen todo. Y en el segundo caso, más de lo mismo.
Ignoro si en Chile tenía mucho predicamento o no, pero es que yo no estoy juzgando a la persona, sino sus palabras.
En cuanto a si el mensaje de Jesús fue el del Partido Comunista, o crear paraísos materialistas en la tierra... pues no, no fue ese el mensaje de Jesús. Los curas no tiene que defender a ningunos "suyos", sino defender la Verdad. Ningún mérito en recibir aplausos de quienes persiguen y atacan a la Iglesia de Cristo, precisamente por haberla atacado. A eso se le llama justo lo contrario: demérito.
En cuanto al divorcio, ¿cómo que hablo de él como si fuera algo malo? ¡Es que es algo malo! El catecismo no lo defiende jamás. ¿Qué catecismo lees tú? El de la Iglesia Católica no, desde luego. Y Jesús lo condenó sin paliativos. Como mucho, la Iglesia permite la separación de los esposos en casos graves, pero no el divorcio (y menos el adulterio posterior si uno de los esposos fornica con otro hombre/otra mujer o vive amancebado con él/ella).
Otra cosa: ¿por qué te preocupa más lo que piensen de ti los no católicos que dar buen ejemplo y decir la verdad a quienes sí lo son? Como decía Jesús, esos ya han recibido su recompensa en este mundo. Ya tienes el aplauso de los anticatólicos, pero a base de haber ocultado la Verdad o haberla deformado para dar gusto a quienes no soportan la sana doctrina -que es de lo que advierten las Escrituras-.
Por cierto: ¿de dónde te has sacado que los no católicos sean mayoría en Chile o en España? En España somos mayoría los católicos, y en Chile me temo que, mal que te pese, también. Pero aunque no te guste, y aunque fueran minoría, la Verdad no depende de mayorías.
Por último, no sé de qué reformas de uno de los Concilios de la Iglesia -hay muchos más, no sólo uo- hablas. ¿Qué dices que no he tenido en cuenta yo?
Ah, y nada de fariseo. Lo pienso de verdad: ojalá se arrepintiera y se haya salvado. Y ojalá tu te conviertas y vuelvas a la Iglesia. Dios no se complace con la perdición de los malvados. Así que, no me iba a alegrar yo, ¿no? Rezaré por ambos.
Un cordial saludo, en Cristo,
CATHOLICVS
Qué pena de obispo. Y qué pena que todavía haya muchos así en el mundo. Que Dios le perdone.
ResponderEliminarEn cuanto a sus palabras sobre el motu propio, ¿acaso no tenemos derecho los fieles a los que nos gusta la liturgia tradicional a disponer de algún sacerdote que nos la pueda decir? ¿Por qué sí puede haber variedad de sensibilidades litúrgicas (véase, Camino Neocatecumenal, RCC, etc...) pero la forma extraordinaria no puede ser permitida? ¿Acaso no es también variedad litúrgica? ¿Acaso no es bueno que cada uno rece, dentro de lo que permite la Iglesia, según más le guste? Me parecen muy injustas las palabras de este obispo.
En cuanto a lo que dice el obispo sobre el divorcio (nunca permitido por la Iglesia; si acaso, la separación) y sobre el "ecumenismo", pues poco tengo que decir, la verdad, porque sus palabras suenan a todo menos a catolicismo. El verdadero ecumenismo no es aguar la doctrina católica y desterrar el catolicismo; no, el verdadero ecumenismo es hacer que todos los grupos herejes y cismáticos (protestantes, evangélicos, ortodoxos, etc...) se conviertan al catolicismo y se integren en la Santa Iglesia Católica.
Y al comentarista que ha criticado al autor del blog, parece que también te muestras tú algo fanático, insultándole y tachándole a él como tal.
En fin, oremos por la conversión de todos los que piensan como el obispo y como el comentarista, para que vuelvan al rebaño de Cristo, la Iglesia Católica.
Gracias por tu comentario, Pensador. Estoy totalmente de acuerdo contigo.
ResponderEliminarAdemás, antes no he comentado algo sobre el ecumenismo: aparte de lo ya dicho, lo afirmado por el recién fallecido obispo y por Alain Hourton no es cierto (de hecho, es justo lo contrario): está habiendo más conversiones de anglicanos -por ejemplo- en los últimos tiempos, que en todo el período postconciliar anterior, en el que abundaron los abusos litúrgicos. En ese momento no sólo no volvían a la Iglesia los herejes y cismáticos, sino que muchísimos católicos salieron corriendo.
Nada ha espantado a más católicos y convertido a menos no-católicos, que esa errónea interpretación del ecumenismo, del Concilio Vaticano II, y de la misma Iglesia.
Saludos, en Xto.,
CATHOLICVS
Creo que todo lo que ha dicho Mons. Hourton en lo que está escrito aquí, lo ha dicho antes S.S. Benedicto XVI en tratados como "El Dios de la Fe y el Dios de los Filósofos", entre otros, antes de ser elegido Papa. Hasta donde yo sé, las autoridades de la Iglesia no se han pronunciado en contra de este obispo, ni han dicho que está en oposición a ella, por lo que nosotros tampoco deberíamos hacerlo. La página web de la Iglesia Chilena anuncia su muerte pero no habla nada de cismas, de rompimientos, de rebeliones, ni nada parecido.
ResponderEliminarSer favorable al divorcio civil no tiene nada que ver con ser favorable al divorcio eclesial, al fin y al cabo, el único matrimonio como tal, contraído ante Dios, es el eclesial, así que el otro no es TAN crucial. Yo, por supuesto no estoy de acuerdo, pero acepto que dicha postura no es anti-católica, sino una interpretación estrictamente dentro del margen marcado por la Iglesia, no recomendada, pero tampoco condenada magisterialmente.
Creo que deberíais de revisar vuestra unidad con la Iglesia Católica, pues este blog parece más bien de la Iglesia Lefevbriana. Por algo S.S. el Papa le ha pedido a los lefevbrianos que reformulen ciertas cosas si quieren participar de la comunión de la Iglesia Católica, porque hay cosas que están en clara oposición a los lineamientos del Concilio Vaticano II, por lo que no es nada nuevo lo que dijo Mons. Hourton. Hasta ahora, veo que vosotros os estáis dedicando a decir quién pertenece y quién no a la Iglesia, éso es muy peligroso, pues no os compete, creo que éso es mucho más peligroso para la unidad que cualquiera de las declaraciones de Mons. Hourton. La aceptación de todos los carismas es la esencia de la común-unión, no la unidad en una sola interpretación y un solo carisma, éso es comunismo, no unidad, la unidad acepta la pluralidad, aunque no comparta toda su visión. Hasta ahora, S.S. el Papa no ha condenado a nadie, por lo que está aceptando esta visión, no os dejéis envolver por vuestra única visión de las cosas.
También cabe mencionar que el traje de talar no es obligatorio a los obispos, es una costumbre más bien arraigada en Europa, y que está aceptado que cada obispo, en función de su trabajo pastoral, elija su vestimenta de la manera que considere que sea mejor. En general, las Conferencias de Obispos regulan la vestimenta en visión del entorno cultural en el que se mueven. Temuco es una región con una alta población indígena, en la cual el talar ciertamente representa un choque y un distanciamiento, que desde nuestra perspectiva occidental es difícil de juzgar. Está bien que los obispos usen talar en Europa, pero no los obliguéis a usarlo en África ni en Sudamérica, no tiene sentido. No digo que esté mal, sino que su uso obligatorio no se justifica. Ciertamente no es tampoco lo que a mí más me gusta, que estuviera vestido tan informalmente, pero no creo que sea algo que deberíamos de criticar, él habrá tenido sus razones, espero que muy santas.
Criticar de esta manera a un obispo, en público, en las redes sociales, simplemente tomando como parámetro uno solo de los carismas que existen dentro de la Iglesia, me parece injusto, poco católico, y poco cristiano. Al final, estáis haciendo un daño a la propia Iglesia al hablar así de sus pastores, no expulséis ni excomulguéis a todo aquel que no os guste, no es razón suficiente. Sed pacientes, y esperad a lo que digan las autoridades eclesiales, esa prisa por juzgar y condenar no es una actitud cristiana, ni profética, más bien mundana, egoísta y difamatoria.
Curioso que el mismo Arzobispo de Santiago presida el funeral de este "hereje" en la Catedral Metropolitana (http://noticias.iglesia.cl/noticia.php?id=16422) y que el mismo Arzobispo, cuya unidad con la Iglesia no está puesta en duda, diga que la identidad de Mons. Hourton consistió en ser "un símbolo de Jesucristo, que buscó vivir el Evangelio con toda profundidad"... http://www.es.gloria.tv/?media=225095
ResponderEliminarEn fin, quizás vosotros tenéis más autoridad para juzgar herejes que un obispo ordenado por S.S. el Papa, no lo sé. ¿O ahora también condenaréis al arzobispo?
Hola Álvaro de la G.:
ResponderEliminarS.S.Benedicto XVI no ha dicho nunca nada parecido en lo referente al divorcio. Y en cuanto al tema de la Iglesia y el ecumenismo, precisamente lo que criticaba Mons. Hourton eran las aclaraciones que hizo la Congregación para la Doctrina de la Fe y el mismo Papa. Da igual si fue el cardenal Ratzinger antes u otro cardenal ahora. Es la máxima autoridad en Doctrina y Magisterio, para evitar interpretaciones torticeras, tan de moda durante varias décadas: "el Concilio ha dicho...", cuando ni el Concilio había dicho eso, ni se había tenido en cuenta tampoco el Magisterio de dos mil años -porque es cuando Jesucristo fundó la Iglesia, no hace 40 años-.
Dices que la Iglesia no se han pronunciado en contra de este obispo. Yo tampoco. He aclarado que lo denunciable es lo que decía. Y eso sí lo ha condenado la Iglesia. No es necesario hacer condenas nominales, ni recordar que quien no cree en lo que cree la Iglesia, no es católico. No se necesita papel alguno que lo certifique. Pero quien juzga es Dios. Yo espero que se arrepintiera de sus pecados antes de morir, como es lógico.
También dices que la página web de la Iglesia Chilena anuncia su muerte pero no habla nada de cismas, rompimientos... Yo tampoco. ¿Dónde has leído eso?
En cuanto al divorcio, ¿cómo que no está condenado magisterialmente? Condenadísimo. Lo único que permite la Iglesia en casos muy graves es la separación, y en tal caso con la imposibilidad de volver a casarse -ni por lo civil, ni, por supuesto, por la Iglesia-. El matrimonio civil no tiene valor alguno para los católicos; el divorcio civil -que es el único existente-, mucho menos. ¿Cómo un sacerdote, y menos un obispo, va a recomendar que alguien peque? ¿O cree que los no católicos no pecan? Los católicos no podemos recomendar que alguien cometa un pecado con la excusa de que no es católico. Por supuesto, el pecado no consiste en el libelo de repudio. No es el papel el pecado, sino la ruptura de un compromiso hecho ante Dios que obliga hasta la muerte y, además, con la intención de volver a unirse a otra persona de forma adúltera. ¿Aún sigues creyendo que un católico puede ver el mal como un bien, y además recomendarlo? Pues conoces bien poco de la Iglesia, entonces.
Por último, aclararte que no tengo ninguna relación con la FSSPX fundada por Mons. Lefevbre. Pero en lo referente a doctrina de la Iglesia no se les puede reprochar absolutamente nada, al contrario que quienes sostienen herejías totalmente contrarias a la Iglesia -incluso a lo que dice el Concilio Vaticano II, que sólo se pone de excusa para hacer lo que a cada uno le da la gana, incluso contradiciendo al mismo Concilio-.
Yerra en lo del traje talar. No es costumbre: es ley, universal y de obligado cumplimiento. No es competencia de las Conferencias Episcopales. Lo prescribe el Código de Derecho Canónico vigente (promulgado por el beato Juan Pablo II en 1983), canon 284, que no se presta a ninguna interpretación desde que la Congregación para el Clero aprobó en 1994 el "Directorio para el ministerio y la vida de los presbíteros", y la Nota explicativa del "Consejo Pontificio para la interpretación de los Textos Legislativos", que aclara que ese artículo tiene categoría de Decreto general ejecutorio, y por tanto, obliga jurídicamente.
Además, la excusa que pone no se sostiene: no lleva alzacuellos porque da calor... pero lleva el último botón de la camisa abrochado hasta el cuello. Vamos, que no llevaba alzacuellos para tocar las narices y demostrar que la Ley de la Iglesia se la pasaba por el forro. Muy buen ejemplo en un obispo, sí señor.
Insisto: yo no critico ni juzgo a una persona: critico palabras, acciones, actitudes, desobediencias, escándalos... esos son totalmente criticables; cuánto más en un obispo, que debería dar ejemplo. Se critica para corregir el error, que es una obra de misericordia. Pero vamos, que poco he criticado: me he limitado a exponer literalmente sus palabras, que hablan por sí solas.
Saludos,
CATHOLICVS
Descansa en paz Monseñor Hourton, tuve el provilegio de conocerle y sin duda una persona muy humanitaria... como deberían ser todos los que se consideran católicos.
ResponderEliminarQue descanse en paz, sí. Pudo ser una persona muy humanitaria -lo desconozco, porque no le conocí personalmente-, pero lo que sabemos de él por lo que él mismo decía, es justamente lo contrario de como deberían ser los católicos, cuyo modelo es Nuestro Señor Jesucristo, no este sacerdote heterodoxo.
ResponderEliminarVeo tu blgo, y lo último que me dan ganas es de ser católico. Está lleno de críticas y condenas, así como exaltaciones de una corriente minoritaria, como son los tridentinos, una defensa exagerada a los lefebvrianos, y nada de mensajes cristianos y positivos, sólo te dedicas a criticar y no a mostrar lo bueno. Creo que en vez de advertirnos contra quien tú crees que no es un católico ejemplar, nos deberías de mostrar quiénes sí son católicos ejemplares. Y ésto no es para que pongas sólo a los que van con tus ideas, bastante cuestionadas dentro de la Iglesia, sino para que pongas algo CATÓLICO, UNIVERSAL, no esa religión para pocos que tú promueves. No me gusta lo que veo, no veo un espíritu CATOLICVM, sino un espíritu bastante mundano y arrogante.
ResponderEliminarSi no te contesto este comentario es porque quizás ya nunca vuelva a entrar a este blog. Te lo digo no como algo malo, sino como correctio fraterna, de un católico a otro, para que reflexiones la línea que está tomando no sólo tu blog, sino tu corazón, pues a mí me deja un muy mal sabor de boca. A mi me gusta lo de la misa tridentina, no te confundas, no es una crítica a éso, pero creo que te dedicas mucho a perseguir a quienes no les gusta (lo que es absolutamente respetable), y creo que ni deberías de estar buscando declaraciones de tal o cual sacerdote que no les gusta, al final, te rebajas y haces lo mismo que tanto criticas. Deja de criticar y mejor regala un mensaje positivo y lleno de valores cristianos, no sólo formas cristianas, que es lo que necesita el mundo de hoy.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola de nuevo, Álvaro de la G.:
ResponderEliminarEs una pena que digas que viendo mi blog te dan ganas de no ser católico. Yo, en cambio, cuando veo otros blogs y webs que se alejan de la Iglesia, me siento más orgulloso de pertenecer a Ella, aunque me dé pena que otros se alejen.
En cuanto a que mi blog esté lleno de críticas y condenas... critico y condeno lo que, a la luz del Magisterio de la Iglesia es criticable y condenable, así como todos aquellos actos que son repudiables por cualquiera, sea o no sea católico. ¿O te parecen bien actos como la quema del Belén en Buenos Aires hace tan sólo cuatro días? -por poner un ejemplo-. Pero aunque tú te fijes más en las críticas, hay mucho más contenido: hablo sobre Nuestro Señor Jesucristo, sobre la Santísima Virgen, sobre Santos y mártires, sobre Liturgia y festividades religiosas, sobre Arte, sobre Cine, sobre el Derecho a la Vida de todo ser humano, etc.
También dices que exalto una corriente minoritaria como son los "tridentinos". Si por ese nombre te refieres a quienes les gusta la liturgia anterior a la reforma de S. S. Pablo VI, estás en lo cierto: promuevo la difusión de la liturgia tradicional, en sintonía con la Iglesia y los deseos del Santo Padre, el Papa Benedicto XVI. La Forma Extraordinaria del Rito Romano no es obligatoria hoy en día, y puesto que, como dices, es minoritaria, y considero que es un tesoro de la Iglesia, por eso la promociono. ¿Dónde está lo malo o negativo?
En cuanto a que haga una defensa exagerada a los lefebvrianos... ¿dónde? Yo, el único comentario que he hecho, en esta misma entrada, es que doctrinalmente son intachables, cosa que no puedes negar ni tú, ni nadie. No he dicho ni una sola palabra más. En este punto soy prudente y me atengo a lo que diga la Iglesia. ¿Si espero que haya entendimiento con Roma? ¡Claro! Pero también querría que volvieran a la Iglesia aquellas personas que se han alejado de Ella por razones ideológicas opuestas, como los "teólogos de la liberación". Quisiera que todos los cristianos perteneciesen a la Iglesia que es Una, Santa, Católica y Apostólica, como quiso el Señor, que es quien la fundó. De nuevo, ¿dónde está lo malo o negativo?
Me parece que ves sin ver. Me explico: dices que debería mostrar quiénes sí son católicos ejemplares. ¿No has visto ni una sola entrada sobre santos o mártires? Esos son católicos ejemplares.
En cualquier caso, eres libre de entrar o no en mi blog. Te agradezco que lo hayas hecho y que te hayas tomado el tiempo de escribir comentarios en él, y te deseo que pases unas Felices Pascuas de Navidad en compañía de los tuyos.
Un cordial saludo, en Cristo,
CATHOLICVS
Daniel:
ResponderEliminarClaro que la etiqueta es la de "grupos disidentes" y "cismas". Si hablamos de la "Teología de la Liberación" o de Socialismo/Comunismo, cabe recordar que están condenados formalmente por la Iglesia Católica. Yo, ni quito, ni pongo. Sólo lo acepto, sin transmitir nada diferente al Magisterio de la Iglesia.
Además, ya he señalado que me he limitado a poner citas literales de Mons. Hourton. Fue él quien dijo:
"...al mismo tiempo se producen otros disidentes que se alejan porque no se reconocen en actitudes tan conservadoras".
Como ves, no soy yo quien ha colocado entre los disidentes a este obispo. Pero si él mismo se contaba entre los disidentes que señala, simplemente me limito a transcribirlo.
Mi actitud no es "qué malos los disidentes, que se vayan de la Iglesia", sino más bien "qué equivocados, ojalá vuelvan a la Iglesia".
Como a Álvaro de la G., tambien te agradezco tu comentario y te deseo unas Felices Pascuas de Navidad en compañía de los tuyos.
Un cordial saludo, en Cristo,
CATHOLICVS
Saludos, dejémoslo ahí. Cada quien ha expresado sus posturas. Lo importante creo que es la unión, y no polarizar. Deseo a los autores de este blog una Feliz Navidad, tiempo de verdadera renovación y reconciliación.
ResponderEliminarMuy simple y corto...
ResponderEliminarNo creo en ni un Dios, pero creo en la verdad y en el respeto, y el solo hecho que él haya defendido los DD.HH en Chile, creo que le da créditos más que suficiente para "Que el Altísimo reciba su alma, y le perdone sus pecados y el escándalo que produjo entre los fieles católicos con sus enormes y graves errores".
Tu mismo dices que la iglesia debiese defender la verdad, entonces por favor dime que fue lo que él como monseñor y principalmente, como ser humano hizo, sino fue defender la verdad?
Hola Anónimo. Gracias por tu comentario. Dices que no crees en Dios... En tal caso, quizás te resulte difícil entender que una persona que, presuntamente, defiende los DD.HH. se merece, como mucho, el reconocimiento de las autoridades civiles, no el aplauso de la Iglesia, ni, en ningún caso, la salvación eterna. Para lograr esto último, los requisitos son muy claros y los lleva transmitiendo la Iglesia desde hace dos milenios, y nada tienen que ver con la filosofía masónica que inspiró a los "iluminados" diociochescos que se sacaron de la manga esos subjetivos derechos humanos, para contraponerlos a las obligaciones humanas para con Dios y Sus derechos.
EliminarEn cuanto a si defendió la verdad... Espero que sí. Jesucristo es el Camino, la Verdad y la Vida. Todo lo que no sea compatible, no es verdad, sino falso. En cualquier caso, como pastor tenía más obligaciones que cualquier simple seglar. Sólo Dios puede juzgarle. Yo, como he dicho, espero que le haya perdonado -todos tenemos cosas por las que ser perdonados-.
Un saludo,
CATHOLICVS
Lo más probable es que a pesar de nuestros buenos deseos ese "obispo" debe estar ardiendo en el infierno, igual que todos los herejes y los no católicos.
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