Un grupo anarquista se atribuye la autoría de la bomba casera desactivada el pasado jueves en la Catedral de la Almudena de Madrid (España)

El artefacto, de fabricación casera, llevaba 200 gramos de pólvora y cerca de un kilo de tornillos para multiplicar el daño. Fue descubierto por un sacerdote e inmediatamente se desalojó el templo.

El pasado jueves, 7 de febrero, fue descubierta una bomba casera por uno de los sacerdotes en el interior del templo. Los técnicos en desactivación de explosivos (TEDAX) desactivaron el artefacto, compuesto por un despertador, 200 gramos de pólvora, una bombona de cámping gas y cerca de un kilo de tornillos. A las 13:20 horas, uno de los sacerdotes de la catedral madrileña, en una vuelta rutinaria por el templo, se percató de la presencia de un paquete sospechoso abandonado en un confesionario, aunque algunos medios hablan de que se hallaba en la sacristía, y otros, en los bancos del templo. Era "muy rudimentario". El sacerdote decidió desalojar el lugar de culto y avisar a la Policía. La Jefatura Superior envió a los TEDAX, que comprobaron que, efectivamente, se trataba de un artefacto explosivo. Tras desactivarlo, los agentes trasladaron la bomba a la Brigada Provincial de información, en Moratalaz -barrio de Madrid-, para analizarla y se acordonó el perímetro de la catedral por precaución.

De momento, se desconoce quién ha fabricado y colocado en el templo el explosivo, aunque un grupo anarquista que se hace llamar 'Comando Insurreccionalista Mateo Morral' -conocido sólo en su casa-, ha reivindicado la autoría.

Se puede firmar un mensaje de apoyo -o escribir uno propio- al Arzobispo de Madrid, S. E. R. Mons. Antonio María S.R.E. Card. Rouco Varela, como cabeza de la Iglesia local de Madrid, en este enlace.

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