Oración que la Santísima Virgen María enseñó a los pastorcitos en una de sus apariciones, y que suele rezarse al final de cada misterio del Santo Rosario:O MI IESV
DIMITE DEBITA NOSTRA
LIBERA NOS AB IGNE INFERNI
CONDVC IN CAELVM OMNES ANIMAS PRAESERTIM
ILLAS QVAE MAXIME INDIGENT MISERICORDIA TVA
AMEN
Oh Jesús mío:
Perdona nuestros pecados.
Líbranos del fuego del infierno.
Lleva a todas las almas al Cielo; especialmente,
a las más necesitadas de Tu misericordia.
Amen.
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Pepe:
ResponderEliminarGracias por participar en mi blog con mi comentario, y disculpa por el tiempo que he tardado en publicarlo, pues últimamente no he podido dedicar el tiempo que requiere este blog.
Por otro lado, me gustaría incidir en en el hecho de que, por muchas cosas acertadas que pueda decir este sacerdote, expulsado de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, sin duda ha perdido el norte (aparte de carecer de una virtud que, en un sacerdote, debería cuidar más: la prudencia)
Los descalificativos que dedica a SS. Benedicto XVI, que es el Obispo de Roma, Vicario de Jesúcristo en la Tierra, Sucesor del Príncipe de los Apóstoles, Sumo Pontífice de la Iglesia Universal, Primado de Italia, Arzobispo Metropolitano de la Provincia Romana, Soberano de la Ciudad del Vaticano y Siervo de los Siervos de Dios, a quien le descalifican es a él.
Rezaré por su arrepentimiento y su vuelta a la Iglesia de Cristo, que es Una, Santa, Católica y Apostólica.
Un cordial saludo, en Cristo,
+ CATHOLICVS