Aviso para los visitantes católicos de lengua española en China:
La "Iglesia Patriótica de Pekín" (brazo religioso del régimen Comunista chino, y separada de Roma) celebrará "misas" en español durante el período en el que se desarrollen los Juegos Olímpicos, en la iglesia de San José del centro de Pekín, todos los domingos a las 17.00 horas (hora local) hasta el 20 de septiembre, en que finalizan los Juegos Paralímpicos.
No acudan a las mismas: la falsa "apertura" religiosa es sólo una maniobra política de cara a la opinión pública internacional, pues es de sobra conocido que China es uno de los países en los que las autoridades comunistas están directamente implicadas en violaciones sistemáticas de la libertad religiosa.
La verdadera Iglesia Católica en China, en comunión con Roma, es la Iglesia clandestina, perseguida, y cuyos más de 12 millones de miembros, incluídos sus obispos (e incluso internautas que la han defendido) han tenido que sufrir arrestos domiciliarios, encarcelamientos, torturas, y posiblemente hasta ejecuciones.
Con motivo de los Juegos Olímpicos, y previo a los mismos, las autoridades comunistas han tratado de restringir aún más las actividades de la Iglesia Católica en la clandestinidad, por lo que si van a viajar allí pidan una dispensa del precepto dominical a su párroco o confesor, pero no traten de encontrar la Iglesia Católica clandestina, pues podría poner en peligro su seguridad y la de los fieles católicos chinos.
Sobre estas líneas y a la izquierda, vemos varias imágenes (publicadas en este artículo de Una Voce) de Joseph Cardenal Zen Ze-kiun, S.D.B., celebrando la Solemne Misa Pontifical según la Forma Extraordinaria del Rito Latino, en la capilla de Cristo Rey de la Escuela de Secundaria Cheung Sha Wan, el sábado 22 de abril de 2006.
Fue creado cardenal presbítero por SS. Benedicto XVI en el consistorio del 24 de marzo de 2006, día en que recibió la birreta roja y el título de Santa María Madre del Redentor en Tor Bella Monaca.
En la Curia Romana es miembro de la Congregación para el Culto Divino y Disciplina de los Sacramentos y de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos.
Recomiendo leer este artículo del semanario católico Alfa y Omega, que se distribuye junto al diario ABC: China no juega limpio.
La "Iglesia Patriótica de Pekín" (brazo religioso del régimen Comunista chino, y separada de Roma) celebrará "misas" en español durante el período en el que se desarrollen los Juegos Olímpicos, en la iglesia de San José del centro de Pekín, todos los domingos a las 17.00 horas (hora local) hasta el 20 de septiembre, en que finalizan los Juegos Paralímpicos.No acudan a las mismas: la falsa "apertura" religiosa es sólo una maniobra política de cara a la opinión pública internacional, pues es de sobra conocido que China es uno de los países en los que las autoridades comunistas están directamente implicadas en violaciones sistemáticas de la libertad religiosa.
La verdadera Iglesia Católica en China, en comunión con Roma, es la Iglesia clandestina, perseguida, y cuyos más de 12 millones de miembros, incluídos sus obispos (e incluso internautas que la han defendido) han tenido que sufrir arrestos domiciliarios, encarcelamientos, torturas, y posiblemente hasta ejecuciones.
Con motivo de los Juegos Olímpicos, y previo a los mismos, las autoridades comunistas han tratado de restringir aún más las actividades de la Iglesia Católica en la clandestinidad, por lo que si van a viajar allí pidan una dispensa del precepto dominical a su párroco o confesor, pero no traten de encontrar la Iglesia Católica clandestina, pues podría poner en peligro su seguridad y la de los fieles católicos chinos.
Sobre estas líneas y a la izquierda, vemos varias imágenes (publicadas en este artículo de Una Voce) de Joseph Cardenal Zen Ze-kiun, S.D.B., celebrando la Solemne Misa Pontifical según la Forma Extraordinaria del Rito Latino, en la capilla de Cristo Rey de la Escuela de Secundaria Cheung Sha Wan, el sábado 22 de abril de 2006.Fue creado cardenal presbítero por SS. Benedicto XVI en el consistorio del 24 de marzo de 2006, día en que recibió la birreta roja y el título de Santa María Madre del Redentor en Tor Bella Monaca.
En la Curia Romana es miembro de la Congregación para el Culto Divino y Disciplina de los Sacramentos y de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos.
Recomiendo leer este artículo del semanario católico Alfa y Omega, que se distribuye junto al diario ABC: China no juega limpio. 
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