El Papa, el infierno y los judíos

Además de habernos levantado hoy con la "noticia" en todas las televisiones, según dos de los diarios de la progresía laicista española (El País y 20minutos) el Papa ha "resucitado" el infierno.
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Esta "noticia" no es tal para ningún católico, pero para estos medios, que citan a su vez al diario italiano izquierdista "La Repubblica", parece ser que sí, y se toman la molestia de tergiversar toda la doctrina católica, las declaraciones de SS. Benedicto XVI, y hasta las de SS. Juan Pablo II. Veamos cómo:

Según el diario 20minutos, SS. Benedicto XVI "contradice" las palabras pronunciadas por SS. Juan Pablo II en 1999, y subtitula así esta "noticia" en su edición digital:

"Ratzinger asegura que 'la casa de satanás existe y es eterna'. También ha autorizado las misas en latín".

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Me pregunto: ¿Qué tendrá que ver "autorizar" las misas en latín, que llevan realizándose ininterrumpidamente desde hace 2.000 años, con la existencia del diablo y el infierno, que también ha sido dogma de fe siempre?

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Pues 20minutos nos lo "aclara":

."El papa Benedicto XVI ha afirmado que hay que recuperar el sentido del infierno para poder así luchar contra el pluralismo moral y la modernidad que invade este mundo. En su llamada a la intolerancia con el relativismo y la laicidad, Benedicto XVI ha decidido reponer las armas del catolicismo clásico [...] Se trata de recuperar el protagonismo perdido y para ello Benedicto asegura que 'la proclamación de que el infierno existe y es eterno es la continuación de esa estrategia', contraponiéndose así a las directrices de su antecesor, el polaco Juan Pablo II, el cual elimino tales conceptos y desmontó la credulidad popular sobre el cielo, el purgatorio, el infierno e, incluso, el diablo".

Evidentemente, tales afirmaciones son una tergiversación de la realidad, pues la creencia en la existencia del diablo y los novísimos jamás ha sido para los católicos sólo una cuestión de "credulidad popular", sino que son dogma de fe, y jamás ha dicho ningún Pontífice, ni siquiera SS. Juan Pablo II, que el diablo o el infierno no existieran, pues así lo ha confesado siempre la Iglesia.

Pero además, según estos laicistas, hablar de estos temas por parte del Papa sólo responde a una estrategia para recuperar un presunto "protagonismo perdido"... No lo dirán porque no sean ellos quienes día sí y día también sacan a la Iglesia y al Papa en titulares, precisamente para atacar al catolicismo manipulando noticias y declaraciones, que sacan fuera de contexto cuando no se las inventan directamente. Lo importante para estos medios públicamente anticatólicos, es tachar a la Iglesia y a los católicos de ser "retrógrados" e "intolerantes", ya que eso está muy mal visto hoy en día y hay que ser "políticamente correctos", creando así un sentimiento de rechazo en la opinión pública.

Como señalo, una de las formas de fomentar ese rechazo en la gente es subrayando el carácter supuestamente "retrógrado" de la Iglesia y del actual Papa. Leamos lo que a continuación dice el mismo diario al respecto:

"Apuesta por volver al pasado"

La decisión de Benedicto XVI de volver a poner sobre la mesa, sin matices, la idea del infierno eterno choca con ese pasado reciente. No es su primera vuelta al pasado.

También ha autorizado las misas en latín con el oficiante de espaldas a los feligreses, por citar un sólo ejemplo. Lo curioso es que hace menos de un año, el 6 de octubre de 2006, este papa mantenía el timón de Juan Pablo II haciendo público el documento de los expertos sobre la inexistencia del limbo, otra de las piezas señeras del Más Allá católico".

Se aprecian varias estrategias (esta vez sí) por parte del "periodista" para provocar dicho rechazo: una es la alusión al "oficiante de espaldas a los feligreses" y la otra es la simple mentira de que algún Papa haya publicado un documento negando la existencia del limbo. En el primer caso, el empleo del término "de espaldas" quiere dar a entender que es la Iglesia la que da la espalda a la gente, cuando la forma de celebrar de la Misa Tridentina no es "de espaldas" a nadie, sino "versus ad Orientem" o "versus Ad Deum" (dirigidos "hacia Oriente" o "hacia Dios") Parece que lo que les molesta no es que se dé "la espalda" a los fieles, sino que a quien no se dé la espalda sea a Dios, presente de forma real en el sagrario. En cuanto a que la Iglesia o algún Papa haya negado la existencia del limbo, es sencillamente falso. La existencia del limbo es una cuestión que aún siguen debatiendo algunos teólogos, pero ningún Papa la ha negado.

El diario socialista "El País" vuelve a reincidir en lo mismo (nótese el sustantivo "papa" en minúsculas, como si fuera un nombre común y hubiese varios):

"El papa Benedicto XVI resucita el infierno. Contra lo dicho por Juan Pablo II en 1999, Ratzinger sostiene que 'el infierno, del que se habla poco en este tiempo, existe y es eterno' ".

Mienten con un desparpajo que sonroja: el actual Pontífice no ha contradicho nada afirmado por SS. Juan Pablo II ni por ningún otro Papa. Todos los católicos creen que el infierno existe y es eterno. Y no sólo porque lo diga uno u otro Papa, sino porque así lo afirmó el mismo Jesucristo. Los Papas, como vicarios suyos al frente de la Iglesia por Él fundada, sólo transmiten su Palabra, sin haberse inventado nada.

Para dar énfasis a su tergiversación, este diario nos "recuerda": " 'El cielo', dijo entonces el pontífice polaco, no es 'un lugar físico entre las nubes'. El infierno tampoco es 'un lugar', sino 'la situación de quien se aparta de Dios'. El Purgatorio es un estado provisional de 'purificación' que nada tiene que ver con ubicaciones terrenales. Y Satanás 'está vencido: Jesús nos ha liberado de su temor' ".

¿Quién les ha dicho a los redactores de "El País" que los católicos hayan creido alguna vez (antes o ahora), que el Cielo sea un lugar "entre las nubes"? ¿Qué tiene que ver que Cielo o Infierno no sean lugares "terrenales", o que no temamos a Satanás, con que no existan? ¿Dónde está la contradicción entre lo dicho por los dos últimos Papas, si lo que este diario presupone es sencillamente falso?

Según ellos, como también afirmaron en su momento, SS. Juan Pablo II revisó entonces la doctrina oficial sobre el Más Allá " 'por el acoso de la ciencia', ya que 'Roma no quería repetir la amarga historia de Galileo' ". ¡Si no lo leo no lo creo! ¿Merece la pena comentar semejantes "trolas" y disparates?

También para "El País", se trata de una "vuelta al pasado" por parte de SS. Benedicto XVI, y al igual que "20minutos" (¿quién habrá copiado a quién?) enlaza esto con la "autorización" de las "misas en latín con el oficiante de espaldas a los feligreses" (sic) y con la manifiesta mentira de un inexistente documento de "expertos" sobre la "inexistencia del limbo", al que atribuyen un "origen medieval y poco relevante entre los teólogos modernos a no ser porque se hermana con la idea, también arrumbada por el Vaticano II, de que fuera de la Iglesia romana no había salvación".

¡Pero si la Iglesia Católica sigue afirmando que fuera de la Iglesia no hay salvación! ¿De dónde se habrá sacado "El País" que el Concilio Vaticano II rechazara esa "idea", si se trata de un Dogma de Fe? ¿No se han leido el último documento de la Congregación para la Doctrina de la Fe al respecto? Naturalmente que no: eso no les interesa, no vaya a ser que ya no puedan mentir tan descaradamente si lo mencionan.

Y ya lo increible, cuando este diario afirma: "La escatología cristiana posterior al Vaticano II sostiene que fue introducido por san Agustín, al extender a todos los hombres la culpa por aquel pecado original -sucedido en un paraíso que la ciencia tampoco pudo encontrar-, lo que hizo fue una mala traducción de una de las epístolas de san Pablo". ¡Toma ya! La existencia del pecado original, también dogma de fe y afirmado por Jesucristo mismo y los Apóstoles, es para "El País" nada menos que un "invento" de San Agustín, varios siglos después, y atribuye falsamente esta idea a la Iglesia.

En serio, este diario y los de su misma "cuerda", mejor podrían dedicarse a transmitir información y noticias sobre la pésima gestión y todos los problemas que tienen que afrontar los gobiernos de izquierda de España e Italia, en lugar de crear cortinas de humo sacando "noticias" ficticias sobre la Iglesia Católica o declaraciones tergiversadas y manipuladas de sus principales representantes y figuras destacadas.

Recomiendo este artículo de ACI Prensa: "Lo que verdaderamente dijo el Papa sobre el Infierno".

Por otra parte, el diario vaticano "L'Osservatore Romano" se hace eco de una nota del Vaticano en la que informa de que SS. Benedicto XVI ha modificado la oración del Viernes Santo del Misal de 1962, para la celebración de la Eucaristía en latín, en la que se pide por los judíos. El Santo Padre ha dispuesto que el "Oremus et pro Iudaeis" de la Liturgia del Viernes Santo de dicho Misal Romano sea sustituido por el siguiente texto:

“Oremus et pro Iudaeis. Ut Deus et Dominus noster illuminet corda eorum, ut agnoscant Iesum Christum salvatorem omnium hominum. Oremus. Flectamus genua. Levate. Omnipotens sempiterne Deus, qui vis ut omnes homines salvi fiant et ad agnitionem veritatis veniant, concede propitius, ut plenitudine gentium in Ecclesiam Tuam intrante omnis Israel salvus fiat. Per Christum Dominum nostrum. Amen".

Traducción al español:

“Oremos también por los judíos Para que nuestro Dios y Señor ilumine sus corazones, para que reconozcan a Jesucristo salvador de todos los hombres. Oremos. Nos ponemos de rodillas. De pie. Dios omnipotente y eterno, que quieres que todos los hombres se salven y alcancen el conocimiento de la verdad que procede de Ti, concede por tu bondad que la plenitud de los pueblos entre en tu Iglesia y todo Israel sea salvado. Por Cristo nuestro Señor, Amén”.

La nota también precisa que "este texto deberá ser utilizado, a partir de este año, en todas las celebraciones de la liturgia del Viernes Santo con el citado Misal Romano".

Con esta nueva oración, "la fórmula que será leída el Viernes Santo es una simple invitación a rezar por los judíos. Juan XXIII ya había retirado el adjetivo 'pérfidos' (infieles) para describir a los judíos, pero todavía quedaba la frase sobre la necesidad de su conversión. En la versión actualizada para el Misal también desaparece la referencia a la 'ceguera' del pueblo judío". En la oración antigua se pedía "liberar a este pueblo de las tinieblas", referencia que también ha sido eliminada, con lo que ahora queda una sencilla oración que pide por el pueblo judío para que descubra a Jesús como salvador.