miércoles, 8 de febrero de 2017

Fotos de la solemne Santa Misa Tridentina Pontifical en el trono de la fiesta de la Candelaria oficiada por el Obispo de Madison, Wisconsin (EE.UU.)

Estas imágenes fueron tomadas el pasado jueves 2 de febrero, fiesta de la Purificación de Nuestra Señora (Candelaria), durante la solemne Santa Misa Tridentina Pontifical oficiada en el trono por S. E. Mons. Robert C. Morlino, obispo de Madison, en la capilla del Centro Obispo O'Connor, en la diócesis de Madison, Wisconsin (EE.UU.), a la que precedió la bendición de las velas y procesión de las candelas. Fotos: Sociedad de la Misa Tridentina de Madison (Facebook).

martes, 7 de febrero de 2017

El responsable de caridad de la Orden de Malta justifica el reparto de condones y dice que la caída de donativos no se debe a éso sino al enfrentamiento con el Papa. La nueva reforma podría posibilitar su acceso o el de Albrecht von Boeselager al puesto de Gran Maestre

Según relata el semanario británico The Tablet [autodenominado "católico progresista"], el pasado jueves 2 de febrero el responsable de la rama caritativa [filantrópica, más bien] de los Caballeros de la Orden de Malta, Dominique de La Rochefoucauld-Montbel, afirmó en rueda de prensa que tanto él como Albrecht von Boeselager -a la derecha en la foto que abre esta entrada, en la que aparecen ambos durante dicha rueda de prensa-, que anteriormente había dirigido la rama de caridad mundial de la Orden [se trata del Gran Canciller destituido por el reparto de condones], tomaron medidas cuando la Orden fue informada de que los condones estaban siendo distribuidos.

No dice qué medidas tomaron. Sin embargo, justifica dicha distribución:

Rochefoucauld-Montbel explicó que los condones fueron distribuidos en partes de África y en Myanmar donde los caballeros participaban en un proyecto diseñado para ayudar a prevenir la esclavitud sexual. "Hay que seguir los principios", explicó. "Pero de vez en cuando nos encontramos en una disyuntiva, y tenemos que encontrar una solución dentro de la enseñanza de la Iglesia. No siempre es fácil".

Y como no es fácil, ante la duda... ¡a distribuir condones!

También admitió que el "lío" producido en la Orden (ver aquí, aquí y aquí) ha llevado a una caída en los donativos, y en Francia, donde se recaudaban millones de euros al año [el texto original habla de libras], ha disminuído alrededor de 30.000 euros (25.800 libras). "Esto ha sido problemático para nuestros donantes", dijo Dominique de La Rochefoucauld-Montbel a los periodistas. "La gente ha decidido no ayudarnos porque pensaban que estábamos luchando contra el Papa. Pero no era cierto. Necesitamos restablecer la confianza".

Así que, ya lo saben: los benefactores de la Orden no han dejado de dar donativos porque con su dinero se paguen y repartan condones, algo condenado por la moral de la Iglesia Católica, sino "por estar luchando contra el Papa". ¿Se lo habrán preguntado a todos los ex donantes, uno por uno?

También afirmó que ahora la prioridad de la Orden era centrarse en su trabajo a favor de los pobres y los enfermos y, en particular, de los refugiados.

Es decir: como cualquier otra ONG mundana. Como si hubiera que elegir entre la atención a los pobres y refugiados o seguir los principios morales de la Iglesia Católica. ¿Acaso no han sido compatibles durante dos milenios? ¿Por qué ahora iban a dejar de serlo? Pues, por lo visto, en las prioridades de la nueva Orden de Malta los princios morales, la evangelización y la religión en sí misma, ni están ni se los espera.

Por último, el referido artículo plantea un dato interesante: actualmente, los únicos candidatos que pueden optar a ser elegidos como Gran Maestre son aquellos que han hecho los votos completos, es decir, tan sólo 55 de los 13.500 caballeros con los que cuenta la Orden de Malta. Tras su comisariamiento por parte de la Santa Sede, las anunciadas reformas podrían permitir que dicho puesto estuviera abierto a caballeros del rango inferior, haciendo posible que tipos como von Boeselager o Rochefoucauld-Montbel puedan ser elegidos.

lunes, 6 de febrero de 2017

Reportaje fotográfico de las Confirmaciones tradicionales y Santa Misa Tridentina Pontifical en el faldistorio oficiada por S. E. Mons. Athanasius Schneider en Guadalajara (Méjico)

Anteayer y ayer, 4 y 5 de febrero, sábado y V Domingo después de Epifanía, S. E. Mons. Athanasius Schneider, obispo titular de Celerina y auxiliar de Santa María en Astaná (Kazajistán), administró el sacramento de la Confirmación a varios fieles, en el Rito Romano tradicional, y ofició la solemne Santa Misa Tridentina Pontifical en el faldistorio, en el Santuario de Guadalupe -cuatro primeras fotos- y en el Sagrario Metropolitano de Guadalajara, Jalisco (Méjico), en el marco de la visita que está realizando a Méjico (ver aquí y aquí), donde está participando en el II Congreso "Summorum Pontificum", que se está llevando a cabo entre los días 3 y 6 de febrero. A la ceremonia asistió gran cantidad de fieles, que llenaban el templo, como se observa en las imágenes. Fotos: Fraternidad Sacerdotal de San Pedro en México (Facebook).

sábado, 4 de febrero de 2017

Las calles de Roma han amanecido empapeladas con carteles críticos con el Papa Francisco (ACTUALIZADO CON MÁS FOTOGRAFÍAS)

Por primera vez desde hace 150 años, esta mañana de sábado las calles de Roma han amanecido empapeladas con carteles críticos con el Papa Francisco. Este tipo de pasquines críticos eran habituales antes de 1870, cuando los Papas eran también los gobernantes seculares de los Estados Pontificios. Los carteles cercanos al Vaticano han sido cubiertos, pero los hay por toda la capital italiana. Como se aprecia en las imágenes, el texto, escrito en italiano "romano", dice así:

"Ah Francisco, has comisariado Congregaciones, removido sacerdotes, decapitado la Orden de Malta y los Franciscanos de la Inmaculada, ignorado Cardenales... Pero, ¿dónde está tu misericordia?".

viernes, 3 de febrero de 2017

Fotos de la Santa Misa Tridentina Prelaticia de la fiesta de la Purificación de la Santísima Virgen María oficiada por Mons. Athanasius Schneider en la Catedral Metropolitana de Ciudad de Méjico

Estas fotografías fueron tomadas ayer, jueves 2 de febrero, fiesta de la Purificación de la Santísima Virgen María, durante la solemne Santa Misa Tridentina Prelaticia oficiada a las 13:30 horas por S. E. Mons. Athanasius Schneider, Obispo titular de Celerina y auxiliar de Santa María en Astaná (Kazajistán), en el altar de los Reyes de la Santa Iglesia Catedral Metropolitana de Ciudad de Méjico, que se enmarca en la visita que está realizando a Méjico (ver aquí), donde participará en el II Congreso "Summorum Pontificum". Fotos: Jóvenes Lumen Christi (Facebook).

jueves, 2 de febrero de 2017

Declaración de cuatro Confraternidades de Clérigos de habla inglesa apoyando a los cuatro Cardenales y pidiendo al Papa Francisco que aclare "Amoris laetitia", mientras los obispos alemanes hacen oficial el permiso para que los adúlteros comulguen

Cuatro confraternidades internacionales de clérigos católicos -las de Estados Unidos, Australia, Irlanda e Inglaterra- hicieron pública ayer, miércoles 1 de febrero, una declaración conjunta sobre la Exhortación Apostólica post-sinodal "Amoris laetitia".

Mientras tanto, la impresentable Conferencia Episcopal Alemana (en la imagen que abre esta entrada) ha publicado un documento, coincidiendo con la publicación de las declaraciones -en sentido opuesto al de sus compatriotas- del Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el también alemán Cardenal Gerhard Müller (ver aquí), en el que los obispos alemanes establecen oficialmente que, en virtud de ciertos pasajes de "Amoris laetitia" -incluyendo las polémicas notas al pie-, los adúlteros no arrepentidos y sin propósito de la enmienda pueden recibir sacrílegamente la Comunión.

Nada sorprendente, teniendo en cuenta la deriva moral -inmoral, más bien- de la Conferencia Episcopal Alemana (ver aquí), que en 2012 estableció oficialmente y por decreto la simonía -negando los sacramentos a quienes no paguen el impuesto religioso-, que apoya la homosexualidad y la anticoncepción (ver aquí), y que dio permiso expreso para que los hospitales católicos alemanes perpetren abortos dispensando en ellos la píldora del día después, también conocida como PDD (ver aquí).

El contraste con los sacerdotes de las cuatro confraternidades de clérigos católicos mencionadas más arriba, es notable. Esta es su declaración, que he traducido al español:

Declaración de las Confraternidades del Clero Católico

01/02/2017

Como miembros de las Confraternidades Internacionales del Clero Católico creemos que sería de un gran valor una interpretación autorizada de la exhortación apostólica Amoris Laetitia en línea con la constante enseñanza y práctica de la Iglesia. Esta afirmación surge a la luz de la continua y generalizada divergencia de comprensión y crecientes divisiones en la práctica. Claramente se necesita una aclaración para corregir el mal uso de la Exhortación Apostólica para socavar la sagrada Tradición. Por ello damos las gracias a los eminentes Cardenales que han presentado recientemente su dubia a la Santa Sede, solicitando tal aclaración. Las Confraternidades reconocen que esta acción ha sido tomada por amor a la Iglesia y preocupación por la salvación de las almas. Como lo han dejado claro los propios Cardenales, se ha dado este paso con profundo respeto por nuestro Santo Padre, el Papa Francisco, y de ninguna manera debe ser utilizado para fomentar divisiones en la Iglesia. El grave peligro para la unidad de la Iglesia debido al creciente relativismo moral debe ser abordado con honestidad y corregido con claridad.

Como pastores de almas, somos bien conscientes de los muchos desafíos a los que se enfrentan los hombres y mujeres de hoy. Nos esforzamos por ayudar a nuestro pueblo, a menudo vive en situaciones complejas, a escuchar la llamada de Cristo y su Evangelio. Esta tarea se hace más fácil cuando la Iglesia expone su enseñanza nítida y claramente. También es esencial que la disciplina de la Iglesia siga siempre su enseñanza dogmática. En particular, dado que en la actualidad hay mucha confusión, es necesario dejar claro que la Sagrada Comunión no puede ser dada a alguien que elija vivir en una relación sexual con una persona diferente a su legítimo esposo o esposa. Quienes se encuentran en esta situación son, por supuesto, merecedores de apoyo pastoral y deben ser ayudados a participar plenamente en la vida de la Iglesia mientras sus circunstancias lo permitan. En relación con ésto, es importante afirmar que la conciencia no está por encima de la ley reemplazando la santa Ley de Dios con el parecer privado, sino que es más bien un eco de la voz del Creador. La dignidad de la conciencia debe ser asistida para superar toda ignorancia y protegida de irse «progresivamente entenebreciendo por el hábito del pecado» (Gaudium et Spes, 16)

Pedir una aclaración de este tipo, que reitera la enseñanza inmutable de la Iglesia, es un acto de amor filial de los fieles hijos de la Iglesia que acuden a nuestro Pastor Supremo en busca de su guía paterna. Es nuestro deseo que esta elucidación [aclaración o explicación] nos permita a nosotros y a otros sacerdotes y diáconos católicos llevar a cabo nuestro ministerio de una manera fiel y efectiva. Esperamos que esta petición de aclaración sirva para que el Santo Padre alimente y cuide al rebaño que le ha confiado el Señor y apoye al clero a hacer lo mismo.

Traducción: CATHOLICVS

miércoles, 1 de febrero de 2017

El Cardenal Müller responde a las "dubia" de los cuatro Cardenales: nuevas declaraciones del Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe en las que critica a los obispos que interpretan "Amoris laetitia" de forma contraria a la Doctrina católica

El Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, S. E. R. Gerhard L. S.R.E. Card. Müller, ha concedido una larga entrevista de seis páginas a la publicación mensual de Apologética "Il Timone" (ver aquí), en la que responde algunas de las cuestiones planteadas en las dubia (ver aquí) enviadas al Papa Francisco -y también a él mismo, en su calidad de Prefecto de la CDF- por los cuatro Cardenales (Sus Eminencias Reverendísimas Walter Card. Brandmüller, Raymond Leo Card. Burke, Carlo Card. Caffarra y Joachim Card. Meisner), y en la que critica a los obispos que están interpretando "Amoris Laetitia" de forma contraria a la Doctrina de la Iglesia. En su blog, Sandro Magister ha recogido una parte de dicha entrevista en la que el Cardenal habla sobre el tema (el resalte en rojo es mío):

P. – ¿Se puede dar una contradicción entre Tradición y conciencia personal?

R. – No, es imposible. Por ejemplo, no se puede decir que hay circunstancias por las cuales un adulterio no constituye un pecado mortal. Para la doctrina católica es imposible la coexistencia entre el pecado mortal y la gracia santificante. Para superar esta absurda contradicción Cristo ha instituido para los fieles el sacramento de la Penitencia y Reconciliación con Dios y con la Iglesia.

P. – Es una cuestión que se discute mucho a propósito del debate en torno a la exhortación post-sinodal "Amoris laetitia".

R. – La "Amoris laetitia" es interpretada claramente a la luz de toda la doctrina de la Iglesia. […] No me agrada, no es correcto que muchos obispos estén interpretando "Amoris laetitia" según su propio modo de entender la enseñanza del Papa. Esto no va en línea con la doctrina católica. El magisterio del Papa es interpretado sólo por él mismo o a través de la Congregación para la Doctrina de la Fe. El Papa interpreta a los obispos, no son los obispos los que deben interpretar al Papa, esto constituiría un derrocamiento de la estructura de la Iglesia Católica. A todos ellos que hablan demasiado, les recomiendo estudiar primero la doctrina [de los concilios] sobre el papado y sobre el episcopado. Como maestro de la palabra, el obispo debe ser el primero en estar bien formado para no correr el riesgo que un ciego conduzca de la mano a otros ciegos. [...]

P. – La exhortación de san Juan Pablo II, "Familiaris consortio", prevé que las parejas de divorciados que se han vuelto a casar y que no pueden separarse, para poder acceder a los sacramentos deben comprometerse a vivir en continencia. ¿Todavía es válido este compromiso?

R. – Ciertamente que sí, no está superado porque no es solamente una ley positiva de Juan Pablo II, sino que él mismo expresó lo que es constitutivamente un elemento de la teología moral cristiana y de la teología de los sacramentos. La confusión sobre este punto remite también a la falta de aceptación de la encíclica "Veritatis splendor" con la clara doctrina de lo "intrinsece malum". […] Para nosotros el matrimonio es la expresión de la participación de la unidad entre Cristo esposo y su esposa la Iglesia. Ésta no es, como han dicho algunos durante el Sínodo, una simple y vaga analogía. ¡No! Ésta es la sustancia del sacramento, y ningún poder en el cielo y en la tierra, ni siquiera un ángel, ni el Papa, ni un concilio ni una ley de los obispos tienen la facultad de modificarlo.

P. – ¿Cómo se puede resolver el caos que se genera a causa de las diferentes interpretaciones que se han dado de este pasaje de Amoris laetitia?

R. – Recomiendo a todos reflexionar, estudiando antes la doctrina de la Iglesia, a partir de la Palabra de Dios en las Sagrada Escrituras, que es muy clara respecto al matrimonio. Aconsejaría también no entrar en ninguna casuística que puede generar fácilmente malentendidos, sobre todo el que afirma que si se muere el amor, entonces se muere el vínculo matrimonial. Éstos son sofismas: la Palabra de Dios es muy clara y la Iglesia no acepta secularizar el matrimonio. La tarea de los sacerdotes y de los obispos no es la de crear confusión, sino la de aportar claridad. No podemos referirnos solamente a pequeños pasajes presentes en "Amoris laetitia", sino que es necesario leer todo en su conjunto, con la finalidad de hacer más atractivo para las personas el Evangelio del matrimonio y de la familia. No es "Amoris laetitia" la que ha provocado una interpretación confusa, sino algunos confundidos intérpretes de ella. Todos debemos comprender y aceptar la doctrina de Cristo y de su Iglesia, y al mismo tiempo estar dispuestos a ayudar a los demás a comprenderla y a ponerla en práctica también en situaciones difíciles.


(Traducción: José Arturo Quarracino)